Sunday, June 3, 2012

¿Que Tan Aburrida Es La Misa? Part 8

¿Que Tan Aburrida Es La Misa? Part 8
How Boring Is The Mass? Part 8


-----------------------------------------------------------------------------------------------

Contigo voy Virgen pura y en tu poder voy confiado, pues yendo de ti amparado, mi alma estará segura.
Dulce Madre no te alejes, tu vista de mí no apartes, ven conmigo a todas partes y solo nunca me dejes. Ya que me proteges tanto, como verdadera Madre, ruega para que me bendiga el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amen.

Lecturas del Domingo 07/15/12


Comentario a las lecturas del Domingo 07/15/12 del hermano José María Vegas, cmf


Listen to Fr. Baron's commentary for Sunday 07/15/12
-----------------------------------------------------------------------------------------------
NOTE: To go directly to the English Section click HERE.
-----------------------------------------------------------------------------------------------


Este blog es dedicado a mi Señor y mi Dios; mi Salvador y Redentor; mi Hermano Mayor y Amigo que nunca falla; mi Maestro y Rey: Yeshua Hammashiach = Jesús el Mesías.



Con este articulo, concluiremos la serie “¿Qué Tan Aburrida Es La Misa?”, podría haber llamado el artículo anterior “La Nueva Alianza”, la parte 8va de esta serie, pero la llamé de forma diferente sólo para enfatizar la importancia de la Nueva Alianza para nosotros los Cristianos, ya sea que seamos Católicos o Protestantes.



Mistagogía

No discutiré en detalle el Credo y la parte final de la Misa, sino que presentaré ahora un concepto que para muchos de nosotros es “misterioso” o nada familiar, todos los que hemos estudiado, fuimos presentados alguna vez con conceptos difíciles de comprender, pero al continuar los estudios la dificultad fue desapareciendo poco a poco, hasta que comprendimos con claridad lo que al principio parecía tan extraño y difícil; por ejemplo, el Álgebra (y las matemáticas en general) presentan cierto problema para muchos estudiantes, pero al ponernos a estudiar y resolver los problemas que nos recomiendan los maestros, nos vamos haciendo mejores en el arte de las matemáticas.

Si ud. ha practicado algún deporte como el Tennis, el Golf, Béisbol o Fútbol (Soccer), recordará que al comienzo no lo hacíamos muy bien, pero con la práctica llegamos a nuevos niveles de experiencia y muchos (con talento natural o sin él) se vuelven diestros en ese deporte. Es igual con nuestra doctrina, entre mas leemos, estudiamos, y atendemos seminarios y cursillos presentados por expertos teólogos y sacerdotes, descubrimos nuevos niveles de entendimiento y afirmación a nuestra fe.

De forma elemental, la mistagogía, es la educación que recibimos como bautizados, es decir la catequesis mas avanzada que se nos da, como suplemento a la participación en la Misa; si un Católico sólo va a Misa los Domingos, pero no se instruye mas en la fe, su comprensión del concepto de la presencia de Dios entre nosotros, será un poco débil, pero si estudia la Biblia en grupo y bajo la guiá de expertos, llegara a tener un concepto mas claro de lo que es el misterio de la presencia de Cristo en la Iglesia.

Es decir, la mistagogía es un camino que nos lleva al misterio de Cristo, especialmente basamos nuestra explicación en las palabras del Señor, quien nos dijo: “Yo estaré con uds. todos los días, hasta el fin del mundo.” El Señor se hace presente entre nosotros, porque él así lo prometió, pero es nuestra obligación saber reconocerlo o salir a su encuentro; a como podemos ver en (Proverbios 8:17) Yo amo a los que me aman y los que me buscan me encontrarán. Y leemos en (Jeremías 29:13) Me buscaréis y me encontraréis cuando me solicitéis de todo corazón.



San Pablo precisamente non habla del misterio de Cristo en (Efesios 3:1-6) Por lo cual yo, Pablo, el prisionero de Cristo por vosotros los gentiles... (2) si es que conocéis la misión de la gracia que Dios me concedió en orden a vosotros: (3) cómo me fue comunicado por una revelación el conocimiento del Misterio, tal como brevemente acabo de exponeros.

  1. Según esto, leyéndolo podéis entender mi conocimiento del Misterio de Cristo; (5) Misterio que en generaciones pasadas no fue dado a conocer a los hombres, como ha sido ahora revelado a sus santos apóstoles y profetas por el Espíritu: (6) que los gentiles sois coherederos, miembros del mismo Cuerpo y partícipes de la misma Promesa en Cristo Jesús por medio del Evangelio, (7) del cual he llegado a ser ministro, conforme al don de la gracia de Dios a mí concedida por la fuerza de su poder. (8) A mí, el menor de todos los santos, me fue concedida esta gracia: la de anunciar a los gentiles la inescrutable riqueza de Cristo. Ese camino o mistagogía, nos lleva a tener una comprensión personal, de Cristo y su presencia en la Iglesia, hoy y hasta el fin.

Es necesario leer la Biblia

Si leemos la Biblia en conjunto, aprovecharemos mas de las enseñanzas del Espíritu Santo, quien nos hará comprender en términos prácticos y comunes las verdades que nuestro Señor nos ha revelado; nuestra razón estará siempre activa en este proceso, para poner en práctica los aspectos de la celebración de la Eucaristía; en la cual se encuentra el misterio de Cristo y su realidad invisible.

Todos los Objetos religiosos son parte de la mistagogía

El camino que nos lleva al misterio de Cristo no sólo es la Sagrada Escritura, sino también el edificio de la Iglesia, que posee una estructura única, para distinguirla de los demás edificios al rededor; la ornamentación dentro de la iglesia, la música, y la vestimenta del sacerdote, son todos un conjunto didáctico y que conducen a sentirnos en la presencia del Rey.

Esto no quiere decir que solo los que estudian o leen mucha la Sagrada Escritura, y los teólogos llegaran a comprender o experimentar la presencia del Señor entre nosotros, absolutamente no, pues el requisito principal para encontrarnos con Dios, es la humildad de corazón; sí, ya he repetido esto muchas veces, pero es algo tan vital, como lo es el respirar para poder vivir. ¿A quienes se les anunció el nacimiento del Mesías? ¿No fue a los humildes pastores del campo? Y ¿Quien fue la primera persona en reconocer a Jesús como el hijo de Dios? ¿Acaso no fue un niño que ni siquiera había nacido todavía (un feto) llamado Juan el Bautista? (Lucas 1:41) Y sucedió que, en cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, e Isabel quedó llena del Espíritu Santo.

¡Ah! Los teólogos, pueden conocer mucho sobre las Escrituras, pero eso no quiere decir que conocen a Dios; por ejemplo, una persona puede saber mucho sobre el presidente John Kennedy, pero nunca lo conoció a él, ni lo conocerá; ¿quien conoció al presidente de forma íntima? Pues sus hermanos, Ted y Bobby Kennedy, su esposa Jacqueline Kennedy y sus hijos que el tuvo con su mujer. En resumen, no es lo mismo conocer algo sobre Dios, que conocer a Dios. Recordemos que una de las promesas de la “Nueva Alianza” es: “Cada persona, me conocerá a mi, y nadie necesitará que su vecino le diga, ven, conoce al Señor”

El altar de la Iglesia, la mesa del Señor

Casi para finalizar les hablaré un poco sobre el altar de la Iglesia, este debe ser de forma proporcionada al espacio presbiteral, y debe ser fijo en representación de la piedra viva que es Cristo (1 Pedro 2:4) Se han acercado al que es la piedra viva rechazada por los hombres, y que sin embargo es preciosa para Dios que la escogió. Ademas el altar debe de ser cubierto por un mantel en señal de respeto, pues el altar es a como ya hemos visto, símbolo de Cristo, del Calvario y del Sepulcro del cual resurge glorioso el Señor.

El altar es ademas mesa, sobre la cual es preparado el Cordero de Dios, por eso debe de ser incensado junto con el libro de los Evangelios colocado sobre el mismo; a como nos dice el Catecismo: “El altar, en torno al cual la Iglesia se reúne en la celebración de la Eucaristía, representa los dos aspectos de un mismo misterio: el altar del sacrificio y la mesa del Señor, y esto, tanto mas cuanto que el altar cristiano es símbolo de Cristo mismo presente en medio de la asamblea de sus fieles, a la vez como la víctima ofrecida por nuestra reconciliación y como alimento celestial que se nos da.” O sea que el altar representa el Cuerpo de Cristo, y el Cuerpo de Cristo está sobre el altar.

Con esto concluimos nuestra serie ¿Qué tan Aburrida es la Misa?, espero que la mistagogía, les sea ahora familiar, no se cansen de buscar al Señor, y de vivir y comportarse como discípulos de Cristo Jesús, nuestro Salvador y Redentor; cuando uds. exclamen no como Arquímedes, que exclamó: ¡eureka! ( ¡lo he encontrado!) cuando en su baño encontró la forma de encontrar la densidad y el volumen de la corona del rey por medio del desplazamiento de agua; sino, como Jacob que dijo: (Génesis 28:16) ¡verdaderamente que el Señor esta aquí y no me daba cuenta! Habrán entonces uds. completado la mistagogía que al principio les parecía tan extraña.

Por favor oren por nuestro Papa su Santidad Benedicto XVI, y por la Iglesia Católica en USA, especialmente, porque se encuentra en estos momentos bajo peligro.



Que Dios Padre, el Hijo y el Espíritu santo los bendiga, y que los santos Ángeles los protejan durante el día y cuando duermen.

Que la Santa Virgen María, los Santos del Cielo y los Ángeles rueguen a Dios por nosotros, Amen!

Regresar al comienzo del Artículo

Pase a dar su comentario (opinión)




"English Section"

Listen to Fr. Barron's commentary for Sunday 07/15/12

We conclude with this article the series “How Boring is the Mass?”, I could've called the previous article “The New Covenant”, the 8th part of this series, but, I wanted to emphasize the importance of the New Covenant, for us the Christians, whether we are Catholics or Protestants.



Mistagogy

We'll skip the Creed and the final part of the Mass, instead, we'll talk about a concept that appears a little bit mysterious for some of us; everyone of us when we were in school, were at some point introduced to concepts that were a little bit hard to comprehend, but with some study and time, we were able to understand with clarity something that was at the beginning strange or hard to digest; for example , the algebra (math in general) presents some difficulty for some students, but after some studying and practice, it gets easier and easier to handle.

If you have ever play a sport like Tennis, Golf, Baseball, or Football (soccer), you know that at the beginning we were not too good at it, but with practice we achieve some proficiency, and some people even become real experts at the sport. It is the same thing with our doctrine, the more we read and attend seminars, or cursillos presented by priests and theologians, the more we discover new insights and understanding of our faith.

Simply put, mistagogy is the additional education (catechesis) that we receive as baptized individuals, to supplement the homilies of the Mass, and to get a better grip of the Catholic doctrine and the mystery of the presence of Christ among us; to strengthen our faith, we must study the Bible in a group, under the supervision of an expert, this will help us to get a deeper meaning and understanding of the presence of the Lord in the Church.

In other words, mistagogy is a path that leads us to the mystery of Christ, especially when he says: (Matt 28:20) “I will be with you always, till the end of time.” The Lord is present among us, because he made that promise, now, our obligation is to know him, to go out and meet him; as you can read in (Proverbs 8:17) I love those who love me, and those who seek me find me. And in (Jeremiah 29:13) You will seek me and find me when you seek me with all your heart.

St. Paul talks about the mystery of Christ in: (Ephesians 3:2-6)Surely you have heard about the administration of God’s grace that was given to me for you, (3)that is, the mystery made known to me by revelation, as I have already written briefly. (4) I n reading this, then, you will be able to understand my insight into the mystery of Christ, (5) which was not made known to people in other generations as it has now been revealed by the Spirit to God’s holy apostles and prophets. (6) This mystery is that through the gospel the Gentiles are heirs together with Israel, members together of one body, and sharers together in the promise in Christ Jesus. That way or path, leads us to a personal understanding of Christ and his presence in the Church now and to the end.

We must study the Bible

If we participate in a Bible study group, we will take better advantage of the teachings of the Holy Spirit, who will help us through practical and common terms to understand the principles that our Lord has reveal to the Church; our reason will be always engaged through this process, to put into practice the aspects of the Eucharistic celebration; in which we find the mystery of Christ and his invisible reality.

All the Religious Objects play a role in the mistagogy


The path that leads us to the mystery of Christ is not only sacred Scripture, but the building of the church as well, with its unique structure and architecture, that distinguishes it from all the other buildings around it; we have to add the music and the ornamentation of the church and the priest's vestment which form a whole didactic package, that takes us into the presence of the King.

We don't mean to say that, only the ones that study the Bible and the theologians could understand and experience the presence of the Lord among us, absolutely not, since the main prerequisite to find God, is a humble heart; I know that I repeated this argument many times, but it is as vital, as it is to breath.

To whom was the birth of the Messiah announced by the angels? Was is not to the humble shepherds in the field? Who was the first person to recognize Jesus as the Son of God? Wasn't it a baby that wasn't even born (fetus) yet, named John the Baptist? (Luke 1:41) When Elizabeth heard Mary’s greeting, the baby leaped in her womb, and Elizabeth was filled with the Holy Spirit.

Ah! The theologians could know the Scripture very well, but, that doesn't mean that they know God; for example; a person could know a lot about the president John Kennedy, but that person never knew him, and won't know him; who really knew the president? I would say his brothers Ted and Bobby Kennedy and his wife Jacqueline and their children. In other words, it is not the same to know about God as it is, to know God. Let's remember that one of the promises of the New Covenant is : No longer will they teach their neighbor, or say to one another, ‘Know the Lord,’because they will all know me,
from the least of them to the greatest,” declares the Lord.

The altar of the church, the table of the Lord

Maybe you know that, it is a rule that the altar (the table) of the church must be proportional in shape and size to the presbyterial space, it must be of solid construction in representation of Christ the living Stone: (1 Peter 2:4) As you come to him, the living Stone —rejected by humans but chosen by God and precious to him. Besides that, the altar must be cover with a table cloth as a sign of respect, since as we already have seen, the altar is a symbol of Christ, Calvary and the Holy Sepulcher, from which the Lord raised in a glorious way.

The altar is also the table upon which the Lamb of God is prepared, and because of that, it must be incenced together with the Book of the Gospels that is put on it; as the Catechism of the Catholic Church says: [CCC 1383] The altar, around which the Church is gathered in the celebration of the Eucharist, represents the two aspects of the same mystery: the altar of the sacrifice and the table of the Lord. This is all the more so since the Christian altar is the symbol of Christ himself, present in the midst of the assembly of his faithful, both as the victim offered for our reconciliation and as food from heaven who is giving himself to us. "For what is the altar of Christ if not the image of the Body of Christ?" asks St. Ambrose. He says elsewhere, "The altar represents the body [of Christ] and the Body of Christ is on the altar." The liturgy expresses this unity of sacrifice and communion in many prayers.

We conclude this series “How Boring Is The Mass?”, I hope that the concept of Mistagogy is now clear to you, and please never cease to seek for the Lord, and to reflect with your life and behavior that we are disciples of Christ Jesus, our Redeemer and Savior; and that you would be able to shout, not “Eureka!” like Archimedes, but, like Jacob (Genesis 28:16) “Surely the Lord is in this place, and I was not aware of it.” 
Then you have completed the mistagogy, that sounded so strange, when you first started.

Please pray for his holiness Pope Benedict XVI, and for the USA Catholic Church, since it is actually going through perilous times. God bless you all.



Back to The Top Of The Page
Go to the Comments Section

--------------------------------------------------------
Lecturas del Domingo 07/15/12, Domingo XV Tiempo Ordinario, ciclo "B"
______________________________________________________

Primera lectura
Lectura de la profecía de Amós (7,12-15):

En aquellos días, dijo Amasías, sacerdote de Casa-de-Dios, a Amós: «Vidente, vete y refúgiate en tierra de Judá; come allí tu pan y profetiza allí. No vuelvas a profetizar en Casa-de-Dios, porque es el santuario real, el templo del país.» Respondió Amós: «No soy profeta ni hijo de profeta, sino pastor y cultivador de higos. El Señor me sacó de junto al rebaño y me dijo: "Ve y profetiza a mi pueblo de Israel."»


Palabra de Dios
-----------------------------------------------------------------------

Salmo

Sal 84

R. Muéstranos, Señor, tu misericordia y danos tu salvación .


Voy a escuchar lo que dice el Señor: «Dios anuncia la paz a su pueblo y a sus amigos.» La salvación está ya cerca de sus fieles, y la gloria habitará en nuestra tierra. R/.

La misericordia y la fidelidad se encuentran, la justicia y la paz se besan; la fidelidad brota de la tierra, y la justicia mira desde el cielo. R/.

El Señor nos dará lluvia, y nuestra tierra dará su fruto. La justicia marchará ante él, la salvación seguirá sus pasos. R/.

------------------------------------------------------------------
Segunda lectura
 
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (1,3-14):
 
Bendito sea Dios, Padre nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en la persona de Cristo con toda clase de bienes espirituales y celestiales. Él nos eligió en la persona de Cristo, antes de crear el mundo, para que fuésemos santos e irreprochables ante él por el amor. Él nos ha destinado en la persona de Cristo, por pura iniciativa suya, a ser sus hijos, para que la gloria de su gracia, que tan generosamente nos ha concedido en su querido Hijo, redunde en alabanza suya. Por este Hijo, por su sangre, hemos recibido la redención, el perdón de los pecados.

El tesoro de su gracia, sabiduría y prudencia ha sido un derroche para con nosotros, dándonos a conocer el misterio de su voluntad. Éste es el plan que había proyectado realizar por Cristo cuando llegase el momento culminante: recapitular en Cristo todas las cosas del cielo y de la tierra.

Por su medio hemos heredado también nosotros. A esto estábamos destinados por decisión del que hace todo según su voluntad. Y así, nosotros, los que ya esperábamos en Cristo, seremos alabanza de su gloria. Y también vosotros, que habéis escuchado la palabra de verdad, el Evangelio de vuestra salvación, en el que creísteis, habéis sido marcados por Cristo con el Espíritu Santo prometido, el cual es prenda de nuestra herencia, para liberación de su propiedad, para alabanza de su gloria.

Palabra de Dios.
----------------------------------------------------------------------

Evangelio


Lectura del santo evangelio según san Marcos (6,7-13):


En aquel tiempo, llamó Jesús a los Doce y los fue enviando de dos en dos, dándoles autoridad sobre los espíritus inmundos. Les encargó que llevaran para el camino un bastón y nada más, pero ni pan, ni alforja, ni dinero suelto en la faja; que llevasen sandalias, pero no una túnica de repuesto. Y añadió: «Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio. Y si un lugar no os recibe ni os escucha, al marcharos sacudíos el polvo de los pies, para probar su culpa.» Ellos salieron a predicar la conversión, echaban muchos demonios, ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban.


Palabra del Señor



Regresar al comienzo del Artículo

--------------------------------------------------------------

Comentario del Domingo 07/15/12
Comentario del Hermano José María Vegas, cmf
(propiedad de www.Ciudad Redonda.org)


La profecía del envío

---------------------------------------------------

La semana pasada se nos decía que el profeta es un hombre (o una mujer) cualquiera y que, por eso, puede ejercer de profeta para nosotros alguien cercano, con tal de que se convierta en alguien que nos transmite la Palabra de Dios sin componendas ni compromisos; pero también comprendíamos que, como de manera tan clara sucede en el caso de Jesús, esa misma cercanía puede convertirse en una dificultad añadida para que el mensaje de la Palabra que el profeta nos transmite (verbalmente o con su modo de vida) sea acogido.

En este sentido, el verdadero profeta, por más cercano que nos sea (paisano, familiar, amigo) tiene siempre algo de “extranjero”, de extraño, de ajeno, precisamente por su espíritu no acomodaticio, por su capacidad de transmisión de un mensaje religioso o simplemente moral, que puede incomodarnos, poner al descubierto aspectos de nuestra vida que no quisiéramos mirar, precisamente porque sabemos que deberíamos disponernos a cambiar en algún sentido.

Amós hoy, en la primera lectura, es declarado extranjero y, por eso, se le invita a irse del lugar en el que profetiza, allí donde su palabra es incómoda, molesta al culto oficial y al poder que representa, y marchar a Judá, su patria chica. Pero Amós protesta: sus palabras no están ligadas a una profesión, ni menos aún a una procedencia nacional. De hecho, su profesión no es la de profeta (no es un “profeta oficial”, institucional), y por eso sus palabras no pueden acomodarse a intereses particulares (por ejemplo, de tipo nacional). Por procedencia familiar y nacional él es un simple pastor, un vulgar agricultor. Por ello, si dice las palabras que dice es porque Dios lo ha elegido y enviado a hablar. Ante una elección así, es imposible callar.

Descubrimos así un aspecto nuevo e inquietante de esta extraña identidad: el profeta es un enviado de Dios. Jesús, el definitivo enviado de Dios y, por tanto, el verdadero y supremo profeta, hace a sus discípulos partícipes de su misma identidad. Así como él ha sido enviado por el Padre, envía él a sus discípulos. Estos han tenido la experiencia de la Palabra de Dios en contacto directo con quien es su encarnación viva. Es lógico que hayan de salir, enviados por el maestro, para transmitirla a otros. Ya en vida de Jesús fue así, como nos dice el Evangelio de hoy. Y no se trata simplemente de una transmisión teórica, de comunicar y enseñar una doctrina, sino de abrir camino a una realidad viva que se refleja en un estilo y un modo de vida: en comunidad, investidos de una autoridad sobre el mal carente de signos externos de poder, ligeros de equipaje, con sencillez de vida, aceptando lo que les den pero sin exigir nada, avalando la Palabra que transmitían haciendo el bien, curando y liberando.

Después de la muerte y resurrección de Cristo no puede ser de otra manera: el envío para el anuncio es la esencia de la vida misma de la Iglesia. Los discípulos son enviados al mundo entero a transmitir la Palabra de vida que cura y libera. Y es fundamental que el modo de transmisión y la vida de los que transmiten se corresponda con aquello que esa Palabra anuncia. Es cierto que no siempre es así. Por desgracia, no siempre el ejemplo de vida avala el mensaje evangélico transmitido por los que formamos la Iglesia. Y, aunque esto no lo invalida, sin embargo, es cierto que la incoherencia de vida puede mermar mucho la eficacia del anuncio y el testimonio. En este punto es importante que cada cual se examine a sí mismo.

Es frecuente que los cristianos lancemos acusaciones genéricas contra “la Iglesia” y sus pecados, pero eximiéndonos a nosotros mismos de esa crítica. Pero esto es otra forma de incoherencia. Decía san Doroteo que “la causa de toda perturbación consiste en que nadie se acusa a sí mismo”. Es absurdo decir que “los obispos…”, o “los curas…”, o la Iglesia institucional, y así sucesivamente, es así o asá. Existen obispos, curas, religiosos, catequistas, padres de familia, y así con todas las vocaciones cristianas, santos y pecadores, completamente entregados, o que viven a medio gas o, incluso, en contra de lo que dicen profesar. Las palabras de Jesús hoy han de ser, no una piedra para arrojársela a los demás, sino un espejo en que cada uno debe mirarse a sí mismo.

Así que hoy todos los cristianos, enviados de un modo u otro, a testimoniar y anunciar el Evangelio según nuestra vocación, somos invitados a reflexionar sobre la calidad de nuestro testimonio y sobre nuestra coherencia de vida. Como aquellos discípulos, enviados de dos en dos, tenemos que comprender que para poder cumplir esta misión tenemos que empaparnos antes de esta palabra viva que es el contacto personal con Jesucristo. El mero hecho de ser enviados puede ya ser un signo de que, en cierto sentido, nos convertimos, como Amós, en extranjeros en nuestra propia tierra en la que la Palabra puede encontrar una fuerte oposición.

Y es que es cierto que la Palabra que Dios nos dirige es con frecuencia incómoda, difícil de aceptar, ya que denuncia lo que en nosotros y en nuestro entorno la contradice (contradice a la verdad, el bien y la justicia). Pero tenemos que tener también la certeza y la experiencia personal de que, pese a esas dificultades (que, con frecuencia, nosotros mismos sentimos), lo que la Palabra de Dios quiere transmitirnos es, en realidad, y al fin y a la postre, una buena noticia, una bendición, ya que, realmente, Dios “nos ha bendecido en la persona de Cristo con toda clase de bienes espirituales y celestiales” y nos eligió antes de la creación del mundo para que fuésemos consagrados e irreprochables ante él por el amor, nos ha destinado, ni más ni menos, que a ser sus hijos en Cristo, su Hijo.

En una palabra, es fundamental que cada uno de nosotros los creyentes, elegidos y enviados, encarnemos en nosotros mismos, en nuestras actitudes, palabras y obras, que la fe que creemos y profesamos es realmente una Buena Noticia.


Regresar al comienzo del Artículo



--------------------------------------------------------------





=======================================================
=======================================================





Para dejar su comentario, haga click sobre la palabra "comments" abajo y aparecera el espacio de escribir/

To leave your comment, just click on the word "comments" and a dialog box will pop up. Gracias.